Algunas consideraciones a tener en cuenta por parte del maestro a la hora del desarrollo del juego son:
- Presentar el juego con ilusión.
- No debe manifestar preferencias.
- Debe intervenir con tacto sin ser percibido por los niños.
- Participar en los juegos sin que los alumnos pierdan su autonomía.
- Debe ser justo y equitativo en las correcciones.
- Debe respetar siempre a los alumnos.
- Debe dar confianza.
- Debe demostrar que confía en los alumnos.
- Decidir rápidamente en cualquier circunstancia del juego.
- Fomentar el juego limpio.
- Arbitrar con justicia.
- Vivir el juego.
- Aportar entusiasmo hacia el juego y la participación.
- Confiar a los jugadores la organización de los juegos (arbitraje, material, etc.)
- Debe ser respetuoso con las incapacidades de los alumnos, pero exigir sus posibilidades.
- Debe saber afrontar las dificultades y adaptarlas al nivel de los alumnos.
- Debe modificar ciertas reglas e introducir variaciones.
- Debe adaptar otras reglas para que permitan crear nuevos problemas y así provocar nuevas respuestas.
- El niño debe ir encontrando nuevas dificultades que le sometan a una reflexión.
- Entre un juego competitivo y uno cooperativo, elegir siempre el último favoreciendo el desarrollo del niño por encima del resultado.
- Utilizar juegos competitivos enfocando la competitividad como autosuperación.
Y muchas más capacidades ¿cómo resumirlo? desarrollando la capacidad de mantener siempre un espíritu crítico respecto a las actuaciones docentes puede ser la mejor respuesta; será la respuesta que conducirá a las demás.